HISTORIA EN BREVE

  • La temporada de plagas de mascotas ya está aquí, lo que significa que los veterinarios y diversos medios de comunicación lanzan recomendaciones sobre cómo prevenir el gusano del corazón
  • En los últimos años, estas recomendaciones han fomentado la administración de preventivos (insecticidas químicos con efectos secundarios) durante todo el año a todos los perros y gatos, en todo el mundo
  • Mi recomendación alternativa es evaluar el riesgo de tu mascota, su riesgo real de contraer gusanos del corazón en función del lugar donde vives, que es lo que determina la población de mosquitos
  • Si resides en un área donde hay muchos mosquitos, es recomendable consultar a un veterinario integral para que desarrolle un protocolo de prevención adecuado y de esta manera mantenerla segura y saludable
  • También es importante que le hagas exámenes para detectar los parásitos del corazón y otras enfermedades parasitarias, al comienzo y al final de la temporada de plagas en las zonas endémicas de mosquitos

Por la Dra. Karen Shaw Becker

Ya estamos en esa época del año en la que prácticamente nos obligan a aplicar preventivos contra el gusano del corazón a nuestras mascotas. Además, la Sociedad Americana del Gusano del Corazón, los fabricantes de medicamentos contra el gusano del corazón y muchos veterinarios ahora recomiendan administrar medicamentos preventivos durante todo el año, sin importar dónde vivas o el riesgo individual de exposición de cada mascota.

En mi opinión, este no es un enfoque inteligente ni lógico, ya que el lugar donde vives es la consideración más importante al momento de evaluar el riesgo de tu mascota. No concuerdo en que se les debe de administrar insecticidas químicos a todas las mascotas, una vez al mes y durante todo el año.

Ningún medicamento es 100 % seguro. Los preventivos contra los gusanos del corazón son insecticidas químicos con el potencial de crear efectos secundarios a corto y largo plazo que pueden dañar la salud de tu mascota. Además, muchos padres de mascotas no comprenden que estos preventivos en realidad no previenen nada. Envenenan a las larvas del gusano del corazón en la etapa de desarrollo de la microfilaria, lo que causa que se mueran dentro del cuerpo.

Y, además de las preocupaciones sobre la toxicidad de estos insecticidas, también existen evidencias de que los gusanos del corazón se están volviendo mucho más resistentes a ellos.

Exposición excesiva a los preventivos del gusano del corazón

De acuerdo con el mapa de perros propensos al gusano del corazón en 2022 publicado por el Companion Animal Parasite Council (CAPC), solo 1 de cada 100 perros en los Estados Unidos (alrededor del 1.15 %) da positivo a la prueba del gusano del corazón. Y, a pesar de que los gatos no son huéspedes naturales del gusano del corazón, también se recomienda el uso de preventivos durante todo el año.

Además, en solo 10 estados se considera que los perros corren un alto riesgo de infección por el gusano del corazón. Estas cifras en realidad han tenido una tendencia a la baja en los últimos años. Los 10 estados se encuentran sobre todo en el sureste, donde las altas temperaturas y la alta humedad durante los meses más cálidos del año brindan un entorno ideal para que prosperen los mosquitos.

Puedes utilizar la liga del mapa en la parte de arriba para que veas la condición de tu estado y condado, y si obtener mayor información sobre la prevalencia de la enfermedad en tu área (así como de otras enfermedades parasitarias).

El problema con las recomendaciones típicas sobre la prevención del gusano del corazón es que, en lugar de centrarse en la probabilidad de infección y los riesgos versuslos beneficios de administrar productos químicos tóxicos durante todos los meses de cada año de vida, se centran en la naturaleza aterradora de una enfermedad que se presenta en tan solo un pequeño porcentaje de perros.

Es importante entender que los preventivos del gusano del corazón son, como mencioné antes, insecticidas químicos. Además de las preocupaciones sobre su toxicidad, también hay evidencia de una creciente resistencia del gusano del corazón a los preventivos, resistencia que por lo general es el resultado del uso excesivo de ciertas clases de medicamentos.

Quizás la comunidad veterinaria tradicional tenga buenas intenciones en hacer recomendaciones anuales para la prevención del parásito, además de los inconvenientes ya mencionados; sin embargo, el enfoque también asume que los padres perrunos no pueden averiguar cuándo es apropiado proteger a sus mascotas de las picaduras de mosquito.

Cuándo usar preventivos en áreas endémicas de mosquitos

Solo hay unas pocas áreas en los Estados Unidos en las que podría ser aconsejable administrar un preventivo contra el gusano del corazón durante todo el año, lo que significa que el riesgo de infección puede superar los riesgos relacionados con la exposición crónica a un insecticida químico. Dichas áreas se encuentran en el sur de Texas, en el sur de Florida y en algunos otros lugares a lo largo de la costa del Golfo de México.

El resto de los Estados Unidos varía de 3 a 7 meses de alto riesgo de exposición. La mayoría de los estados cuentan con 6 meses o menos. Si te preocupa que tu perro se encuentre en riesgo de contraer una infección por gusanos del corazón, consulta a tu veterinario integral para verificar los siguientes mapas y así saber cuándo comenzar y detener los preventivos contra el parásito.

Por ejemplo, si resides en la costa del Golfo de México, ya sea en Texas o Florida, donde los mosquitos son un problema, el mapa sugiere comenzar a administrar el medicamento preventivo durante el día 1 del mes 1 (enero) y que sea administrado durante todo el año. Sin embargo, si resides en el oeste de Oregón o Washington, el mapa sugiere comenzar la dosificación en julio-agosto y terminar en octubre-noviembre.

Es importante recordar que estos mapas son únicamente un instrumento del botiquín. Digamos que resides en el sur de Nevada, donde casi no hay mosquitos, pero el mapa sugiere comenzar el preventivo en mayo y continuar hasta fin de año. Si eso no tiene sentido para ti, utiliza tu sentido común.

Básate en tu propio conocimiento y experiencia del área en la que vives al evaluar el riesgo para tu mascota.

Consejos importantes para la prevención del gusano del corazón

Si resides en un área de los Estados Unidos donde los mosquitos son comunes y conoces que el riesgo de exposición a la enfermedad del gusano del corazón es importante, mis recomendaciones para proteger a tu peludo amigo son las siguientes:

Si no vives en un área de alto riesgo (por ejemplo, Dakota del Norte), acude con un veterinario integrador para que te recomiende un protocolo preventivo multimodal, incluyendo los nosodes del gusano del corazón, en lugar de solo usar productos químicos.

Asegúrate de realizar pruebas del gusano del corazón cada 3 a 4 meses (no cada año), ya que los preventivos naturales no pueden garantizar que tu mascota nunca obtendrá la enfermedad. Y, debido a que el uso continuo de preventivos químicos no garantiza protección, es importante realizar pruebas al menos cada 6 meses para identificar la presencia lo más pronto posible.

También es importante tener en cuenta que, los desparasitantes gastrointestinales naturales como la tierra de diatomeas y las hierbas antiparasitarias (por ejemplo, ajenjo, semilla de calabaza, tinturas de nuez negra) no son efectivos para matar las larvas, porque los gusanos del corazón viven en el torrente sanguíneo.

Enfócate en que tu mascota tenga buena función inmunológica al darle alimentos frescos, nutricionalmente óptimos y específicos para su especie que le ayuden a reforzar sus defensas naturales. Las carnes sin procesar son ricas en vitaminas B (y una opción menos alergénica que la levadura de cerveza). Asimismo, los alimentos antiparasitarios específicos como el ajo fresco se pueden agregar en pequeñas cantidades para brindar soporte adicional.

Si los riñones y el hígado de tu perro están sanos, intenta usar un solo químico preventivo en la dosis efectiva más baja. Esto podría significar una mezcla de ivermectina o milbemicina, si es necesario, para perros cuyo peso está al final de las instrucciones de dosificación. Administra el tratamiento en intervalos de 6 semanas en lugar de cada 4, por el mínimo de meses necesarios durante la temporada de mosquitos.

Evita los productos químicos multifuncionales que pretenden matar numerosos tipos de gusanos gastrointestinales y parásitos externos. El objetivo es utilizar la menor cantidad del producto químico necesario para eliminar el gusano del corazón. Agregar otros productos químicos a la mezcla aumenta la carga tóxica, mas allá de lo que puede tolerar. También evita aplicar productos químicos preventivos contra pulgas y garrapatas durante la misma semana.

Después de haberle dado los medicamentos para el gusano del corazón, dale algunos agentes de desintoxicación de fuentes naturales, como el cardo mariano y SAMe durante una semana después del tratamiento y dale alimentos ricos en probióticos. Recuerda siempre consultar con el veterinario.

Siempre insiste en una prueba de gusano del corazón antes de comenzar cualquier tratamiento preventivo. Si vives o pasas tiempo con su mascota en áreas donde prevalecen los mosquitos y otras plagas, sobre todo las garrapatas, pídele al veterinario una prueba SNAP-4Dx o la prueba Accuplex, las cuales verifican la presencia de enfermedad de Lyme, ehrlichiosis, anaplasmosis y gusano del corazón.

Me gusta hacer la prueba SNAP-4Dx cada 6 meses en todos los perros que viven en ambientes con mosquitos, pero estas sencillas pruebas de diagnóstico son importantes para los perros que pasan mucho tiempo al aire libre durante el clima cálido porque los parásitos se están volviendo resistentes a los químicos del gusano del corazón y a las pulgas y garrapatas. Cuanto antes se identifique una infección en tu mascota, más pronto podrás establecer el protocolo para tratarlo de manera segura y con menores efectos secundarios a largo plazo.

Si resides en el medio oeste o la costa este de los Estados Unidos, es recomendable verificar la existencia de estas enfermedades a principios de año y al final de la temporada de plagas, ya que pueden crear resistencia a los preventivos y son muy fáciles de tratar cuando se identifican antes de crear enfermedades crónicas.


Fuentes y referencias