📝    HISTORIA EN BREVE

  • La estomatitis felina es una enfermedad bucal crónica muy grave y dolorosa que afecta a los gatos; la enfermedad se caracteriza por un tejido irritado, rojo e inflamado en la boca y parte posterior de la garganta
  • Al parecer, la estomatitis es una enfermedad autoinmune en la que el sistema inmunológico reacciona de forma exagerada a la placa que se acumula en los dientes, lo que genera una respuesta inflamatoria excesiva
  • La estomatitis provoca un dolor intenso y podría disminuir su capacidad para comer, lo que podría ser muy peligroso para tu gato
  • En ocasiones, los casos leves de estomatitis felina pueden tratarse al implementar un enfoque multimodal y agresivo, sin embargo, para la estomatitis avanzada la mejor opción podría ser una extracción dental completa, lo cual puede brindar un alivio inmediato

Se calcula que 1 de cada 7 y hasta el 26 % de los gatos desarrollan una inflamación en toda la boca, que es una afección muy dolorosa llamada gingivoestomatitis felina (FGS, por sus siglas en inglés), o estomatitis. Los síntomas característicos incluyen enrojecimiento en el área de la garganta, inflamación severa en la parte donde se unen los dientes y las encías y, en algunos casos, reabsorción dental. Incluso el hueso subyacente en la boca también se podría inflamar o infectar.

Factores de riesgo de la estomatitis felina

De acuerdo con los expertos, incluyendo el Dr. Jan Bellows, dentista veterinario titulado, se cree que la causa de la estomatitis felina es una respuesta inmunológica exagerada a la placa, lo que significa que los gatos desarrollan alergias a sus propios dientes.

Esta enfermedad a menudo se presenta en gatitos con enfermedades del sistema inmunológico, como el virus de inmunodeficiencia felina (VIF) o el virus de la leucemia felina (VLFe). Muchos gatos con estomatitis también padecen periodontitis, o enfermedad de las encías. 

Algunas razas son más propensas, como los siameses, abisinios, persas, himalayos y birmanos. También existe una variante de la enfermedad que afecta a gatitos de entre 3 y 5 meses de edad, a medida que sus dientes permanentes comienzan a salir. A los 9 meses, estos gatitos tienen una inflamación oral muy grave y, en ocasiones, una infección.

Síntomas a tomar en cuenta

Esta afección comienza como enfermedad de las encías (gingivitis), que se caracteriza por el enrojecimiento en la línea de las encías. Primero se forma un anillo rojo alrededor de los dientes, sobre todo en los premolares y molares, pero por lo regular, toda la encía se enrojece e inflama. Es posible que no veas ninguna placa o sarro en los dientes, no obstante la encía se torna de color rojo intenso, sobre todo en la unión de los dientes y encías. 

La estomatitis provoca un dolor tan intenso que podría afectar la calidad de vida de tu gato. Si tu gatito padece esta enfermedad, es posible que observes cambios de comportamiento, como depresión, irritabilidad, agresión o tendencia a esconderse. Otro síntoma común es el babeo excesivo, junto con encías que sangran con facilidad. 

Debido a que el padecimiento es muy doloroso, muchos gatos tienen problemas para comer. Incluso, algunos gatos dejan de comer después de intentarlo por varios días ya que es muy doloroso. Si tu gato ruega por su comida pero cuando le sirves parece que le da miedo comer, es posible que tenga estomatitis.

Por lo regular, los gatos con estomatitis sufren deshidratación, pérdida de peso y desgaste muscular ya que no pueden comer las calorías suficientes para mantener su peso corporal. 

Otro síntoma común es un mal aliento que podría volverse insoportable, así como la falta de aseo, ya que sienten tanto dolor en la boca que no pueden acicalarse. Muchos gatos con estomatitis se llevan las patas a la boca para tratar de aliviar el dolor e irritación.

Opciones de tratamiento

En ocasiones, los gatos con estomatitis de inicio juvenil responden a un tratamiento médico intensivo, siempre y cuando se administre al inicio del proceso y sus dueños sean muy dedicados. Este tratamiento implica brindarle un excelente cuidado bucal (es decir, cepillarle los dientes y desinfectarle la boca dos veces al día), además de limpiezas profesionales y un control agresivo de la placa y sarro.

Los gatos con esta enfermedad a menudo mejoran cuando se les brinda una alimentación antiinflamatoria que no contenga alimentos que podrían provocar alergias, incluyendo mariscos y aves de corral, así como ingredientes biológicamente inapropiados como papa, arroz, trigo y maíz. También es importante evitar todos los carbohidratos.

Los antiinflamatorios naturales pueden ser beneficiosos, e incluyen complejos de ácidos grasos esterificados, esteroles y esterolinas de origen vegetal y enzimas proteolíticas, los cuales podrían ayudar a controlar los mediadores de la inflamación.

Existen varios nutracéuticos que podrían mejorar la salud de las encías, incluyendo el ubiquinol y los probióticos, los cuales podrían tomarse por vía oral o usarse por vía tópica en la línea de las encías.

Por último, es importante eliminar las fuentes de toxinas que podrían afectar el sistema inmunológico, incluyendo las vacunas innecesarias. 

Extracción dental completa

Por desgracia, para la mayoría de los gatitos con estomatitis, no existen tratamientos médicos a largo plazo que sean muy efectivos. Los veterinarios han probado esteroides, medicamentos inmunosupresores, terapia antibiótica a largo plazo, terapia láser y opciones de anestesia tópica, todas con resultados minimos. Además que todos estos medicamentos tienen efectos secundarios considerables. 

Lo más importante que debes recordar es que un gato con estomatitis tendrá un dolor constante. Un gatito que tiene mucho dolor durante tanto tiempo y que además no come bien, está en grave peligro. 

Por eso, el tratamiento más común es la extracción dental completa, que significa extraer la mayoría o todos los dientes del gatito. Se que este enfoque puede sonar agresivo, pero recuerda que la estomatitis es una enfermedad agresiva, la cual progresa muy rápido hasta el punto en el que el gatito ya no come nada, lo que podría ser mortal.

La buena noticia es que muchos gatos a los que les extraen los dientes (que son la fuente de inflamación, infección y dolor) experimentan un gran alivio y su calidad de vida mejora de forma significativa.

De acuerdo con los dentistas veterinarios titulados del Centro Dental Veterinario, las extracciones dentales completas se realizan en un solo procedimiento quirúrgico para eliminar por completo las estructuras de los dientes y sus raíces.

“Este tratamiento tiene una tasa de curación del 60 %, y el 20 % de los pacientes experimenta una mejora significativa. El veinte por ciento sigue siendo refractario (la inflamación persiste), pero, por fortuna, se puede controlar con ciclosporina”. 

Para los gatos que no se alivian por completo después de la extracción, los investigadores de la Universidad de California, Davis, recomendaron lo siguiente en un estudio de 2023:

“Para los gatos que no responden al tratamiento quirúrgico, la terapia inmunosupresora o inmunomoduladora, sigue siendo una opción. La analgesia también es fundamental. La inmunomodulación mediante la terapia con células estromales mesenquimales proporciona una vía de tratamiento alterna para pacientes refractarios, la cual podría atacar la infección viral crónica que se desarrolla con esta enfermedad. El potencial para estratificar el tratamiento y el uso de nuevas opciones de terapias sistémicas podría revelarse a medida que se identifiquen mejor las vías moleculares involucradas en esta enfermedad”.

Para evitar complicaciones crónicas a causa de la extracción, lo mejor es trabajar con un dentista veterinario. Se deben tomar radiografías digitales después de la extracción para asegurarse que todas las raíces del diente se hayan extraído con éxito. Recuerde que debe seguir con el tratamiento para dolor hasta que se resuelva el malestar posquirúrgico y su gatito se termine de curar.