📝    HISTORIA EN BREVE

• Cada vez son más los dueños de mascotas que buscan ingredientes especiales, como prebióticos y probióticos, en los alimentos que compran
• Es importante saber que para algunas mascotas con trastornos gastrointestinales, los prebióticos pueden empeorar el problema y no son recomendables
• También es importante saber que, aunque los probióticos son beneficiosos para casi todos los perros y gatos, la mayoría de los probióticos que se agregan a los alimentos comerciales para mascotas se eliminan durante el proceso de fabricación
• La mejor forma de nutrir a tu mascota es darle una alimentación equilibrada y adecuada para su especie, a base de alimentos frescos y enteros, así como los suplementos apropiados de acuerdo a sus necesidades individuales de nutrientes

De acuerdo con una encuesta nacional de dueños de mascotas que se llevó a cabo en noviembre y diciembre de 2015 por Packaged Facts, cada vez más dueños buscan ingredientes especiales en los alimentos que compran para sus mascotas. ¹ Por ejemplo, buscan que el alimento afirme tener prebióticos y probióticos.

Entre los que respondieron la encuesta en Estados Unidos, el 7 % de los dueños de perros y el 6 % de gatos dijeron que buscaban esta declaración nutricional en los envases de sus alimentos para mascotas.

Aparte de que se desperdicia mucho dinero en la mayoría de los ingredientes especiales que se agregan a los alimentos para mascotas muy procesados, analicemos más de cerca los prebióticos y probióticos.

¿Qué son los prebióticos?

Los prebióticos son ingredientes no digeribles que alimentan el crecimiento de bacterias en el intestino. Son azúcares complejos, y entre ellos se encuentran los fructooligosacáridos (FOS), la inulina y la oligofructosa.

Los FOS se producen a partir de la fermentación natural de la caña de azúcar. La inulina se encuentra de forma natural en la raíz de achicoria, el ajo y la cebolla (pero no se te ocurra darle cebolla a tu mascota). La oligofructosa es un producto de la inulina.

Cuando las bacterias fermentan los prebióticos en el intestino grueso, se producen ácidos grasos de cadena corta (AGCC). Los AGCC brindan una serie de beneficios al tracto gastrointestinal de tu mascota. Ofrecen energía a las células, mantienen el movimiento intestinal y reducen tanto la inflamación como el crecimiento excesivo de bacterias dañinas.

Los prebióticos son perjudiciales para ciertas mascotas

Esas son las ventajas de los prebióticos, sin embargo, no son recomendables para todos los animales. La publicidad afirma que los prebióticos solo alimentan a las bacterias beneficiosas del tracto digestivo, pero los estudios demuestran que no es así, ya que también alimentan a las bacterias perjudiciales.

Para un animal con un tracto digestivo muy saludable, es probable que los prebióticos no causen ningún daño. Pero hoy en día muchas mascotas padecen problemas gastrointestinales (GI) como la enfermedad inflamatoria intestinal (EII), el intestino permeable (disbiosis), el crecimiento excesivo de bacterias en el intestino delgado (SIBO) y otros problemas.

Esto significa que la proporción de bacterias buenas y malas en su tracto gastrointestinal está desequilibrada, y lo último que queremos hacer es alimentar a las bacterias patógenas con prebióticos. Las mascotas con levadura experimentan un deterioro significativo cuando consumen prebióticos. Los prebióticos son azúcares complejos, y el azúcar alimenta la levadura.

El tipo más común de prebiótico que se agrega a las fórmulas populares de alimentos para mascotas es la pulpa de betabel, que es un material fibroso que se encuentra en el betabel azucarero. La pulpa deshidratada del betabel no es una fuente ideal de prebióticos, así como la mayoría de los alimentos procesados para mascotas a precios asequibles no son una buena fuente de nutrientes para tu mascota.

Por lo general, los alimentos comerciales de mayor calidad que contienen prebióticos los enumeran como fructooligosacáridos, raíz de achicoria o ajo. Esos son los ingredientes que debes buscar si tu mascota tiene un intestino muy saludable y no padece ninguna de las afecciones gastrointestinales que suelen afectar a tantas mascotas hoy en día.

Sin embargo, si le das un alimento crudo comercial que sea equilibrado o preparas comida casera para tu mascota, que por lo demás goza de buena salud, no necesitas agregar prebióticos a menos que tu veterinario holístico te los recomiende por alguna razón específica.

El rol de los probióticos en el cuerpo de tu mascota

Los probióticos son cepas amistosas que mantienen niveles saludables de bacterias buenas en el tracto gastrointestinal de tu mascota, y también la defienden frente a bacterias oportunistas que pueden ser patógenas. El tracto digestivo es el órgano inmunológico más grande en el cuerpo de los animales, y en el nuestro.

Tu perro o gato tienen más bacterias intestinales que tú, a pesar de ser mucho más pequeño. El tracto gastrointestinal de las mascotas está diseñado para soportar una enorme cantidad de bacterias, las cuales podrían desencadenar una infección mortal si se encontraran en cualquier otra parte del cuerpo de tu mascota.

Una población saludable de bacterias buenas podría ayudar a que el sistema inmunológico de tu mascota funcione de manera óptima. Si el equilibrio entre los microbios intestinales buenos y malos se altera, tu mascota podría desarrollar síntomas gastrointestinales y volverse más propensa a las enfermedades.

Cuando las bacterias intestinales de tu mascota se encuentran equilibradas con la cantidad y el tipo correcto de bacterias sanas, podemos encontrar una simbiosis. Suceden cosas extraordinarias dentro del cuerpo de tu amigo peludo. Por ejemplo:

• Las vitaminas se fabrican
• La fibra vegetal se procesa de manera eficiente
• Las bacterias dañinas se mantienen bajo control
• Las toxinas se controlan bien

Cuando las bacterias patógenas se apoderan del sistema digestivo de tu mascota, se produce una disbiosis, que es más o menos lo contrario de la simbiosis.

La disbiosis provoca un aumento de la permeabilidad (fugas) de la pared intestinal, lo que significa que el tracto gastrointestinal de tu mascota será menos apto para permitir la entrada de bacterias sanas y nutrientes y para evitar que entren bacterias patógenas.

Un tracto gastrointestinal saludable es selectivo sobre lo que absorbe. Se ingieren los nutrientes, mientras que las sustancias no nutritivas se filtran, incluyendo las toxinas.

Por qué los alimentos procesados con probióticos son un desperdicio de dinero

En lo que respecta a los alimentos procesados para mascotas, es necesario distinguir entre prebióticos y probióticos: los prebióticos suelen agregarse a los alimentos para mascotas, pero los probióticos no pueden (o no deben) agregarse. Si encuentras un alimento para mascotas que afirma contener probióticos, no lo compres.

Los probióticos son sensibles a la humedad y al calor, por lo que si se agregan a una fórmula para alimentos de mascotas, en especial si son croquetas, habrán muerto hace mucho tiempo y serán casi inútiles en el momento en que lleguen al tracto digestivo de tu mascota. Las bacterias de un probiótico deben estar vivas y ser capaces de reproducirse para brindar más beneficios.

Los suplementos probióticos de alta calidad para mascotas tienen algunas cosas importantes en común, tales como:

• Cepas correctas de bacterias beneficiosas para mascotas
• Fácil de administrar a tu perro o gato
• Capacidad para resistir el entorno ácido del estómago de tu mascota
• Cantidad suficiente de organismos vivos para repoblar los intestinos
• Estabilidad del producto en condiciones normales de almacenamiento

Cuando se analizaron varios tipos de alimento para perros que afirman contener microorganismos probióticos, se demostró que el proceso de fabricación elimina muchas de las bacterias vivas, lo que provoca que el efecto probiótico desaparezca al momento de empaquetar y transportar el producto.

Mis recomendaciones principales

Es mucho más saludable darle a tu mascota alimentos frescos y enteros, como parte de una alimentación equilibrada y adecuada para su especie, que una fórmula comercial con una larga lista de ingredientes especiales, como prebióticos adicionales. El Dr. Joseph Wakshlag, profesor asociado de nutrición clínica en la Facultad de Veterinaria de la Universidad Cornell de Nueva York, indicó lo siguiente en una entrevista para Veterinary Practice News:

"... algunos fabricantes incluyen de todo en sus productos, menos el fregadero de la cocina, y los dueños de mascotas pueden pensar que eso lo convierte en un buen alimento, cuando no es así. Los fabricantes a veces tienen ingredientes en sus alimentos que contienen prebióticos de forma natural, pero agregan más como fructooligosacáridos y mananooligosacáridos porque los dueños suelen buscar eso en la lista de ingredientes".²

Tu mascota debe recibir la mayor parte de sus nutrientes de una alimentación de buena calidad. Una vez que hayas aprendido lo básico, consulta a tu veterinario holístico acerca de los suplementos beneficiosos para tu compañero peludo, como probióticos adicionales, según sus necesidades individuales.