HISTORIA EN BREVE

  • La calidad y la esperanza de vida de las mascotas depende mucho de sus dueños
  • Aunque los dueños no pueden influir en los genes que heredó su mascota, sí hay muchas otras cosas que pueden hacer para mejorar la calidad y esperanza de vida de sus amigos peludos
  • Una buena nutrición es la base para que los perros y gatos vivan más y mejor aunque no lo es todo; es muy importante controlar lass porciones de comida para mantenerlos en buen estado físico
  • Realizar exámenes de bienestar dos veces al año, reducir al mínimo las vacunas e implementar un régimen diario para cuidar sus dientes también tendrán un impacto importante en su salud a largo plazo
  • Otras cosas que pueden influir en la salud y longevidad de tu mascota incluyen: supervisarla bien mientras está al aire libre; implementar terapias de apoyo como quiropráctica, masajes y acupuntura; tomar buenas decisiones con respecto a la esterilización; y, reducir o eliminar su exposición a toxinas ambientales

Por la Dra. Karen Shaw Becker

El tercer artículo para celebrar nuestra semana de aniversario trata sobre cómo ayudar a tu mascota a vivir más y mejor. Como veterinaria proactiva para el bienestar integral de las mascotas, mi objetivo es orientar a los dueños que buscan mejorar la salud y la vitalidad de sus mascotas al tomar las mejores decisiones de estilo de vida.

Hay algunos aspectos de tu mascota que no están en tus manos, por ejemplo, su genética o predisposición de su raza. Por suerte, sí hay muchas otras cosas que puedes hacer para mejorar su longevidad y calidad de vida.

10 formas de alargar la esperanza de vida de tu mascota

1. Una buena nutrición. La alimentación de tu mascota es la base para una vida larga y saludable. Darle una alimentación saludable refuerza su sistema inmunológico, su salud digestiva, su sistema musculoesquelético y mucho más. Al igual que en el caso de los humanos, mientras más natural sea la alimentación de tu mascota, mejor.

Mi primera recomendación es darle comida casera, cruda o poco cocida, rica en nutrientes, sin ingredientes transgénicos, y de preferencia que sean orgánicos y específicos para su especie. Muchas personas preparan la comida de su mascota con una variedad de alimentos nutritivos que no son muy costosos. De ese modo, también se aseguran de que su mascota solo coma alimentos de alta calidad.

Pero, si no tienes tiempo o ganas de preparar la comida de tu mascota, otra opción es implementar un enfoque de rotación con una variedad de dietas nutritivas, ya sean crudas, deshidratadas o liofilizadas, que puedes comprar en la tienda para mascotas de tu localidad o en línea.

Si tu mascota tiene algún problema de salud y te preocupan los patógenos en los alimentos crudos, busca marcas que se hayan sometido a uno o más procesos de control de patógenos. Este es el tipo de alimento para mascotas más puro y estéril que podrás encontrar.

Recuerda, mientras más variedad, mejor. Incluso rotar unas cuantas comidas, premios o aderezos frescos a la semana producirá grandes beneficios en la salud de tu mascota.

2. Un peso saludable. Además de una alimentación saludable, otro factor muy importante son las porciones, que dependerán del tamaño, edad y nivel de actividad de tu mascota. Para que tu perro o gato mantenga un peso óptimo debes controlar sus porciones al calcular cuántas calorías debe consumir al día. De este modo puedes asegurarte de que tu familiar de cuatro patas no se convierta en parte de la estadística de obesidad en mascotas.

A diferencia de las mascotas que tienen un peso ideal, los perros y gatos con sobrepeso tienen una mala calidad de vida y viven menos. También sufren una larga lista de problemas de salud que se relacionan con la obesidad, algo que puede evitarse al controlar su peso.

3. Un régimen de ejercicio adecuado. Las mascotas que hacen ejercicio están mucho más saludable que las mascotas sedentarias, y el estado físico de los perros y gatos influye (para bien o para mal) en su longevidad.

Tanto los perros como los gatos necesitan la estimulación mental que ofrece el tiempo de juego y el ejercicio, esto evita que se aburran o desarrollen mecanismos de adaptación neuróticos o molestos. Tu compañero peludo es un atleta por naturaleza. El tiempo de juego y el ejercicio ayudan a que tu mascota se mantenga en buen estado tanto físico como mental.

4. Una buena atención veterinaria. Te recomiendo visitar al veterinario para exámenes de bienestar dos veces al año por la siguiente razón: los animales no se enferman de la noche a la mañana. La transición de la salud a la enfermedad (o de la enfermedad a la salud) ocurre por etapas. Por lo general, los perros y gatos no suelen mostrar cambios físicos y emocionales durante las primeras etapas. Todo se desarrolla poco a poco y muchas veces los signos evidentes aparecen cuando la enfermedad ya está muy avanzada.

El objetivo de estas visitas de bienestar es detectar los problemas de salud en etapas tempranas. Por ejemplo, es muy importante detectar la enfermedad de Lyme antes de que se desarrollen los síntomas. O bien, quieres saber si tu gato tiene niveles elevados de enzimas renales, aunque todo parezca estar bien. De eso se trata la medicina veterinaria proactiva, detectar estos cambios a tiempo y actuar antes de que se convierta en un problema.

Las mascotas envejecen mucho más rápido que los humanos. En general, su esperanza de vida es de unos 10 a 20 años, según su estilo de vida, raza y genética. Eso significa que sus protocolos de bienestar (que incluyen alimentación, suplementos y programas de ejercicio) se modificarán de manera dinámica a lo largo del tiempo, y se basarán en los cambios que se detectan en el examen físico y análisis de sangre. Por esa razón, es muy importante realizar exámenes veterinarios con la frecuencia suficiente para detectar los cambios más sutiles antes de que ocurra un deterioro.

Te recomiendo buscar un veterinario proactivo que se especialice en bienestar integral para que cheque a tu mascota y personalice sus protocolos de estilo de vida cada seis meses. Esto garantizará que tu veterinario detecte los cambios sutiles que ocurren con la edad y ayudará a ralentizar el proceso de envejecimiento al utilizar un protocolo personalizado que se adapte a sus necesidades fisiológicas y estilo de vida.

5. Un protocolo de vacunación adecuado. Cada vez hay más evidencia sobre los peligros potenciales de las vacunas, por lo que ahora más veterinarios reconocen que las vacunas no son las herramientas seguras de "prevención" que pensaban.

Si tu veterinario aún te recomienda vacunar a tu mascota cada año, mejor pídele una prueba de títulos de anticuerpos para medir su inmunidad actual. Si a tu mascota la vacunaron de manera correcta cuando era cachorro o gatito, entonces está protegida de por vida contra la mayoría de las enfermedades virales.

Del mismo modo, si tu veterinario te recomienda vacunas complementarias, pídele que te informe sobre el riesgo real que corre tu mascota de la enfermedad para la que va dirigida la vacuna.

También te recomiendo informarte sobre los riesgos y beneficios las vacunas complementarias, que no suelen ser tan seguras ni efectivas como las vacunas básicas. Para más información sobre las directrices revisadas y mis recomendaciones de vacunación para perros, lee esto.

6. Una buena higiene dental. Los estudios relacionan la enfermedad de las encías con las enfermedades cardíacas en humanos y perros (casi no hay estudios en gatos, pero es razonable suponer que existe una relación similar). Si tu mascota desarrolla una enfermedad periodontal, la superficie de sus encías se debilitará.

El daño en el tejido de las encías permite que las bacterias de la boca invadan su torrente sanguíneo y viajen por todo su cuerpo. Si su sistema inmunológico no elimina las bacterias, pueden llegar hasta el corazón e infectarlo. Los estudios demuestran que una vez que están en el torrente sanguíneo, las bacterias orales son capaces de evadir el sistema inmunológico.

Te recomiendo cepillar los dientes de tu mascota todos los días, o varias veces a la semana como mínimo, así como darle huesos crudos, masticables y huesos dentales apropiados. Además, es importante que realices chequeos orales de rutina en busca de dientes flojos, bultos o protuberancias inusuales en la lengua, debajo de la lengua, a lo largo de la línea de las encías y en el paladar.

Recuerda que tu veterinario debe realizar un chequeo oral completo durante los exámenes de bienestar. De este modo te podrá indicar si hay algún problema en la boca de tu mascota y en caso de ser necesario, podría recomendarte una limpieza dental profesional.

7. Una supervisión adecuada. Por más que te guste que tu mascota pase tiempo al aire libre, no lo recomiendo, excepto bajo ciertas circunstancias muy específicas. La mayoría de las veces, los riesgos (automóviles, ladrones, depredadores, venenos, comida podrida, vida silvestre portadora de enfermedades, etc.) superan por mucho los beneficios.

Cuando saques a pasear a tu perro, siempre debes llevarlo atado a una correa. Algunos casos en los que podrías dejarlo libre es en un parque para perros, en una ruta de senderismo o en una playa que permita perros sin correa. Para que tu perro ande sin correa en estos lugares debe tener entrenamiento para responder de manera confiable a órdenes verbales como siéntate, quédate quieto, déjalo, etc. Si tu gato tiene acceso al aire libre, debe salir con un arnés y correa o puedes dejarlo libre si es un recinto seguro para gatos. Te recomiendo llevar a tu mascota a algún lugar en donde pueda entrar en contacto con la Tierra.

8. Un buen estado físico. Mantener a tu perro o gato activo a través del ejercicio es una de las mejores maneras de mantener una buena integridad musculoesquelética y reforzar la salud de sus órganos. También te recomiendo implementar otras terapias para optimizar la salud y la calidad de vida de tus mascotas. Algunas incluyen tratamientos quiroprácticos y acupuntura, terapia física, masajes, y estiramientos.

Para que tu perro o gato disfrute no solo de una vida larga, sino también de una vida vibrante, necesita la capacidad de moverse de forma cómoda hasta sus últimos días. El estado físico de tu mascota también influye en su calidad de vida.

9. Un buen control de natalidad. Cada uno de los órganos con los que nació tu mascota tiene un trabajo que hacer, y cada sistema de órganos es interdependiente. Extirparle cualquier órgano, incluyendo los órganos reproductivos, tiene consecuencias en su salud. Cada vez hay más evidencia que sugiere que castrar a los perros, sobre todo a una edad temprana, puede causar problemas de salud y comportamiento.

Castrar significa eliminar todos los tejidos que secretan las hormonas sexuales. La "esterilización" hace que el animal ya no pueda reproducirse, pero deja intactos sus tejidos que secretan las hormonas sexuales.

Siempre que es posible, evito cualquiera de estos procedimientos. Sin embargo, este enfoque requiere de un dueño muy responsable que se comprometa por completo y sea capaz de evitar que su mascota se aparee. Mi segunda opción es esterilizar sin castrar.

Esto significa realizar un procedimiento que prevendrá el embarazo mientras preserva los testículos o los ovarios para que aún produzcan hormonas que son esenciales para la salud y el bienestar. Esto suele implicar una vasectomía o esterilización modificada. La esterilización modificada elimina el útero mientras preserva los ovarios productores de hormonas.

Si ninguna de estas opciones es viable para ti y tu mascota es un perro, te recomiendo posponer la esterilización o la castración hasta que tenga al menos 18 meses a 2 años de edad. Los gatos tienen una fisiología reproductiva muy diferente y los efectos dañinos de la castración temprana son mucho menores que en los perros.

10. Un entorno adecuado. Reduce o elimina la exposición de tu mascota a las toxinas. Esto incluyen pesticidas químicos como preventivos contra pulgas y garrapatas, sustancias químicas para el césped (herbicidas, insecticidas etc.), humo de tabaco, retardantes de llama y productos de limpieza para el hogar (detergentes, jabones, limpiadores, toallitas para secadora, aromatizantes, que contienen sustancias químicas que alteran el sistema endocrino y otros agentes que dañan las células).

Debido a que vivimos en un mundo muy tóxico y es casi imposible evitar toda exposición química, te recomiendo implementar un protocolo de desintoxicación para tus mascotas.